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Ideas para tener un curso estupendo

El comienzo del curso escolar es un momento clave en el año tanto para los pequeños como para los más mayores. Es tiempo de volver a empezar -de la mejor manera posible- y de establecer pautas que favorezcan dinámicas adecuadas que permitan que el año pueda desarrollarse sobre las mejores bases, para que el curso pueda convertirse en una vivencia única y maravillosa y que tanto adultos como niños podamos vivirlo con ilusión sin angustias ni nervios.  

En anteriores publicaciones de Cuida de Mí hablábamos sobre cómo establecer rutinas con los más pequeños -y los que ya no lo son tanto- y sobre la importancia de mantener una línea de comunicación adecuada con sus profesores. Hoy, a través de este artículo, queremos hablaros además de otros factores que consideramos clave para que todo pueda ir sobre ruedas.


Como recomendábamos para los niños y niñas de 3 a 6 años, en casa, aunque no debe continuar el colegio, sí que es muy recomendable fomentar sus hábitos de estudio. Porque estos son eso: hábitos, y cuanto antes se instauren, mejor. Las rutinas no son solo para los pequeñines. Los mayores también deben tener su tiempo de merienda y de juego. De extraescolares, de deberes y de estudio diario. Sin olvidarnos de la higiene, la cena y de dormir a su hora.

Por nuestra parte deberemos asegurarnos de cumplir siempre con todo aquello que necesiten para el colegio: material, autorizaciones para excursiones, disfraces para la celebración de fiestas… Asegúrate de que tienen todo lo necesario a tiempo y así, además de ahorrarte el estrés de última hora, los pequeños verán que el colegio es una prioridad para ti y que no hay excusas para no hacer lo que nos pidan, ni a ellos ni a nosotros.

Escúchalos como el adulto que eres y no te enfades si las cosas no les salen bien desde el principio o si no las hacen como las harías tu; aunque tampoco pases por alto determinadas situaciones. Busca la manera de relativizar. De saber ver cuándo una situación es una cosa puntual o cuándo se convierte en algo en lo que debes intervenir. Apóyales y dales seguridad, pero siempre con un margen y bajo unos límites.

Conoce sus capacidades, con la ayuda de sus profesores, para poder establecer metas realistas de cara a que no se generen frustraciones ante expectativas no cumplidas. A todos se nos dan unas cosas mejor y otras peor. Potencia aquello que les guste y que se les dé bien y ayúdales a ser mejores en eso que siempre dejan para el final para que no le genere carencias. Y aunque tu papel no sea el de ser el policía ni su asistente, sí que debes de saber si está haciendo o no las tareas y si cumple con sus trabajos de grupo.

Valora además si sus logros o dificultades se ven afectadas por actividades extraescolares que puedan quitarle tiempo, teniendo en cuenta que lo primero es lo primero y que es mejor ayudarle en lo que necesita que sobrecargarle y que no sepa ni por dónde empezar o que esté demasiado cansado cuando llega a casa para cogerlo con un mínimo de entusiasmo.

Y, como hablábamos en el anterior rango de edad -de 3 a 6 años-, continúa fomentando la lectura y participando activamente en las actividades que proponga el colegio. Forma parte e intégrate ya que a tus hijos les encantará verte ser parte activa de su entorno y además motivará que él/ella sea o se convierta también en una persona activa e integrada con todos los beneficios que eso conlleva.

De 0 a 3 años
De 3 a 6 años
De 6 a 12 años
De 12 a 16 años
De 16 a 18 años

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